Marco Ruiz, ganador del 102º Abierto de la República


Marco Ruiz rompió el molde y dio la sopresa en el Abierto
A principios de 2007, Marco Ruiz no sabía si podía volver a jugar al golf: una hernia de disco lo había alejado de las canchas por más de siete meses, tiempo que estuvo prácticamente sin caminar. Casi doce meses después y con un triunfo en Paraguay en el medio, el jugador de Asunción dio el gran batacazo en el Buenos Aires Golf Club y conquistó el 102º Abierto VISA de la República presentado por Peugeot tras firmar una tarjeta final de 69 golpes (-1) para un total de 275 (-5). En el segundo lugar de este torneo co sancionado con el Challenge Tour Europeo y el Tour de las Americas, terminó Daniel Vancsik que también hizo 69 (.1) y quedó a dos del ganador.

"La verdad es que no esperaba ganar el Abierto, el Pato era el gran favorito y la presión estaba de su lado. Eso me ayudó a jugar tranquilo y concentrarme en mi juego. Realmente esto un sueño", dijo Ruiz, que jugó este torneo gracias a una excención médica que le otorgó el Challenge Tour Europeo. De esta manera, el paraguayo acortó camino en su objetivo de volver al Tour grande del Viejo Continente. "Jugar al golf es lo que me gusta y agradezco a Dios que me dio una segunda oportunidad. Espero no desaprovecharla", agregó el campeón, tercer jugador de su país en conquistar este torneo después de los triunfos de Pedro Martínez en 1996 (Olivos Golf Club) y Raúl Fretes en 1998 (Jockey Club Argentino). Con 33 años y varios títulos como profesional (el último fue el Carlos Franco Invitational en agosto), Marco Ruiz se llevó un cheque de 33.330 dólares.

¿Y Angel Cabrera? El máximo favorito a quedarse con este campeonato y puntero por dos tras los primeros 54 hoyos, tuvo una jornada para el olvido que empezó desde temprano cuando su segundo tiro en el hoyo 1 terminó en el hazard detrás del green. Pelota injugable y un buen bogey. En el 2 salvó el par y ya en el hoyo 3 comenzó a derrumbarse con un doble bogey que le abrió la puerta a Ruiz, Vancsik y el brasileño Alexandre Rocha. "Nunca pude meterme definitivamente en la vuelta. Arranqué mal y cuando quise arriesgar fallé", dijo el cordobés que firmó una tarjeta de 76 golpes (+6) y partió rápidamente para Ezeiza ya que a las 21 sale hacia Sudáfrica para disputar el Abierto de ese país.

La última vuelta de este Abierto VISA de la República presentado por Peugeot fue tan ciclotímica que tuvo a tres jugadores rotando en la punta del campeonato e incluso en varios pasajes de la tarde Cabrera, Ruiz y Vancsik compartieron el primer lugar. "Sabía que debía mantener la concentración sin pensar demasiado en lo que pasaba a mi alrededor", explicó el paraguayo que en 1991 había ganado la Copa Emilio Pereyra Iraola, reservada para el mejor aficionado del Abierto. "En aquella oportunidad recuerdo que miraba al ganador del torneo y deseaba estar en su lugar algún día. Por suerte lo logré, no lo puedo creer", repitió una y otra vez.

Tan cerrada fue la definición de este campeonato que a falta de cuatro hoyos, tres eran los líderes: Angel Cabrera, Daniel Vancsik (jugaba en el grupo de adelante con Eduardo Romero) y el propio Marco Ruiz. Y el que mejor pasó los cinco últimos hoyos de este trazado -los más peligrosos- fue el paraguayo, que aunque subió el par 3 del 14 bajó el 15 y 16 y salvó el par en el 17 y 18. Sus rivales directos, en cambio, cometieron errores que le costaron el torneo. Seguramente Cabrera soñará con el hoyo 17 -un par 4 corto pero con un green isla que intimida-: por tercer día consecutivo tiró su pelota al agua. Esta vez, al igual que el viernes, falló por la derecha su tiro de salida con la madera 3. Pero también se equivocó con su approach y volvió a caer al agua para un triple bogey que lo sacó definitivamente de la lucha.

Un hoyo más adelante, Daniel Vancsik, que había bajado el 16, pegó un segundo tiro muy forzado que terminó a la izquierda del green. El misionero no pudo salvar el par mientras Ruiz hizo 4 en el 17 y llegó al tee del último capítulo con dos de ventaja. Era fundamental el tiro de salida para el jugador del Challenge Tour y allí mostró todo su aplomo, el mismo que habían tenido Pedro Martínez y Raúl Fretes cuando plantaron bandera paraguaya en suelo argentino.
Nunca un campeón Abierto de los Estados Unidos pudo conquistar el Abierto de la República en un mismo año. Pudo haber sido este domingo 9 de diciembre un día histórico para el golf de nuestro país y para Angel Cabrera.

Sin embargo, el cansancio de una temporada plagada de éxitos pero también de eternos viajes de un lado al otro del mundo, hicieron que el cordobés resigne una vez más la posibilidad de ganar el Abierto de su país, algo que no consigue desde 2002. Y para un jugador de la calidad de Cabrera, totalmente instalado en la elite del golf mundial, eso es mucho tiempo.

La Copa Emilio Pereyra Iraola, para un chaqueño
Una de las máximas promesas del golf argentino conquistó por primera vez en su corta carrera como amateur la Copa Emilio Pereyra Iraola, la competencia reservada para los aficionados del Abierto VISA de la República. Con un total de 290 golpes, Emiliano Grillo, de sólo 15 años y nacido en Resistencia, derrotó en el segundo hoyo de playoff a Julián Etulain. Grillo hizo 71 golpes (+1) y compartió el 35º lugar. "Espero algún día también ganar el Abierto, como lo hizo Marco hace muchos años", dijo el chaqueño.

Fuente GMMG