Un torneo que apuntará a proyectar a las promesas

La cita en Hurlingham, del 3 al 6 de abril, facilitará el acceso de los jóvenes a los circuitos internacionales; acuerdo con el PGA Tour


Será un Abierto de la República distinto. "De transición", reconocen sus organizadores. Tradicionalmente, la máxima cita golfística local se disputó en diciembre, pero los nuevos tiempos exigen adaptarse al calendario internacional. Por eso, el torneo, que volverá a formar parte del Challenge Tour Europeo, tomará cuerpo del 3 al 6 del mes próximo en Hurlingham, con motivo del 120° aniversario del club.


¿Por qué se modificó la fecha? Porque el circuito del Viejo Continente quiso darle al certamen un lugar de privilegio en el calendario, ya que lo considera su buque insignia, y prefirió evitar las últimas semanas del año, cuando en los diferentes tours ya no se desarrolla actividad oficial.


Esto implicará que los principales golfistas de nuestro país (Angel Cabrera, Andrés Romero, José Cóceres, Ricardo González, Ariel Cañete, Rafael Echenique) no participen de la 103a versión porque atenderán compromisos en los Estados Unidos y Europa previos al Masters de Augusta. Pero surgió una propuesta interesante para quienes sí dirán presente: el ganador del Abierto obtendrá una plaza para jugar el Puerto Rico Open de 2009, perteneciente al PGA Tour.


"El Abierto de la República de este año -encadenado con el Abierto del Centro, que se jugará una semana antes en Villa Allende- está pensado para que los nuevos profesionales argentinos inicien una carrera con proyección al Challenge Tour y, eventualmente, al PGA Tour. Es darles una mano a esos jugadores que tienen que abrirse paso con la geografía, la distancia y el idioma", explica Mark Lawrie, director ejecutivo de la Asociación Argentina de Golf (AAG).


La oferta es tentadora: el campeón del Abierto dispondrá de un lugar el año próximo en el mejor circuito del mundo, al menos por una semana. Y si en Puerto Rico concluye entre los 10 primeros, sumará dos participaciones más en el PGA Tour. Lógicamente, una eventual victoria multiplicará beneficios asegurándose la permanencia en la gira.


"Esta minitemporada argentina, entre Villa Allende y Hurlingham, apunta justamente a que los golfistas locales acumulen puntos y encaren con una base más sólida su campaña en Europa para el resto del año", agrega Lawrie, que entiende cuál es la situación de las principales figuras criollas: "Honestamente, no queremos condicionar a nuestros golfistas de mayor jerarquía ni hacerlos sentir en un compromiso de jugar en Hurlingham, cuando la realidad es que tienen obligaciones comerciales y juegan por millones de dólares".


Entre el field de 144 jugadores del Abierto, habrá cuatro ganadores del Tour Europeo (Daniel Vancsik, el alemán Tobias Dier y los suecos Cristopher Hanell y Joakim Haeggman) y 17 triunfadores en el Challenge Tour. También participará el defensor del título, el paraguayo Marco Ruiz, que se consagró en el Buenos Aires Golf Club en 2007.


Hurlingham, uno de los clubes fundadores de la AAG, volverá a ser sede luego del triunfo de Angel Cabrera en 2002. En su campo par 70 (6452 yardas), se buscó recuperar la esencia británica de antaño: fueron eliminados bunkers que ya no jugaban para recobrar zonas de juego. El desafío no se enfocará tanto en la distancia, sino en evitar los roughs y en acertar greens pequeños y duros, bien protegidos por las trampas de arena rediseñadas. Se aproxima un Abierto distinto, aunque siempre atrapante.

Gastón Saiz LANACION